Por medio de una secuencia gráfica, los conductores peruanos son advertidos de las penas correspondientes en caso de ocasionar un siniestro de tránsito y se detecta contenido de alcohol en sangre.

Todas ellas se encuentran comprendidas dentro de la llamada Ley de Flagrancia, que entró en vigor en 2016 y luego recibió algunas modificaciones para su actualización en los años siguientes.

La compartimos: