La planta de manufactura de General Motors Venezuela (GMV), ubicada en Valencia, fue embargada, de acuerdo a la notificación enviada la tarde de este martes por el Juzgado Tercero de Primera Instancia en lo Civil, Mercantil y del Tránsito de la Circunscripción del estado Zulia.
Las instalaciones de la compañía con una capacidad de fabricar 45 mil unidades al año, fueron tomadas por la fuerza pública. A través de un comunicado de prensa, la gerencia de la firma informó la situación y aseguró que la planta ya no se encuentra en control de GMV.
Todos los accesos a la empresa fueron bloqueados y existe la posibilidad que las cuentas bancarias sean congeladas. En ese caso, ningún pago, incluyendo salarios, podrá ser realizados en el corto plazo.
En la causa, litigada por GMV desde el año 2000, un ex concesionario de Maracaibo embargó a la empresa por un total de 476 millardos de bolívares en activos. "La demanda originaria, relacionada con la cancelación de la concesionaria por ineficiente desempeño, carece de toda substancia", se asegura en el comunicado. Otros bienes que no fueron especificados también resultaron afectados con la medida.
General Motors Venezolana considera que la cifra solicitada excede toda lógica y haría inviable las actividades de la compañía en forma permanente. La empresa tiene la firme convicción de que el embargo es improcedente, "absurdo, fuera de la lógica jurídica y del debido proceso".
GMV está tomando todas las medidas legales a su alcance con el fin de proteger los derechos de sus trabajadores y de sus bienes. La gerencia solicita a su personal, proveedores, concesionarios y operadores externos, a que se abstengan de asistir a la planta y a sus puestos de trabajo, hasta tanto las medidas judiciales reviertan la situación.
General Motors cesa sus operaciones en Venezuela
Como consecuencia inmediata de la decisión oficial, la corporación General Motors anunció el cierre inmediato de sus operaciones industriales en Venezuela.
Éste es el comunicado oficial divulgado este miércoles por la empresa:
"Fundada en 1948, General Motors Venezolana (GMV), la ensambladora de mayor tradición y antigüedad en el país, líder del mercado por más de 35 años consecutivos, se ve forzada a cesar sus operaciones en Venezuela como consecuencia de un embargo judicial totalmente ilegal. El día de ayer (martes), la planta de la empresa fue sorpresivamente tomada por las autoridades públicas, quienes asumieron el control de la misma, impidiendo el desarrollo de las actividades. Adicionalmente, otros activos de la empresa, como vehículos, fueron sustraídos ilegalmente de sus instalaciones.
El embargo fue dictado en total desconocimiento al derecho a la defensa y al debido proceso, causando un daño irreparable a la compañía, a sus 2.678 trabajadores, a sus 79 concesionarios que representan la red de servicio más grande del país con más de 3.900 trabajadores y, a sus proveedores que representan más del 55% de la industria de autopartes en Venezuela.
Por lo anterior, General Motors Venezolana anuncia el cese inmediato de sus operaciones en el país, y asegura (en la medida que las autoridades lo permitan) el total cumplimiento de las obligaciones legales asociadas a la finalización de la relación laboral con sus trabajadores, debido a causa ajena a la voluntad de las partes.
GMV rechaza contundentemente esta arbitraria medida (el embargo amplio) y ejercerá vigorosamente todas las acciones legales dentro y fuera de Venezuela en contra de la misma.
La Compañía confía en que en el tiempo prevalecerá la justicia y regresará para continuar liderando el mercado venezolano. Mientras tanto, GMV a través de sus concesionarios continuará brindando servicios de posventa y repuestos para todos sus clientes".
Con información de El Carabobeño y La Guía del Motor