Tesla implementó un nuevo sistema de tarifas por limpieza en su servicio de Robotaxi, cobrando a los usuarios que dejen el vehículo sucio o en condiciones inadecuadas al finalizar su viaje.
Según la política actualizada, los cargos se dividen en dos categorías:
- U$50 dólares por desórdenes moderados, como derrames de comida, acumulación excesiva de suciedad o manchas menores.
- U$150 dólares por desórdenes graves, que incluyen residuos biológicos (como vómitos o sangre) o el consumo de tabaco dentro del vehículo.
Estas medidas buscan mantener en buenas condiciones los vehículos autónomos, que no cuentan con un conductor que pueda inspeccionar el estado del interior tras cada viaje. La empresa no ha especificado aún cómo se verificará el daño ni cómo se resolverán las disputas con los usuarios.