Maringá/PR - La situación no está fácil para nadie y mucho menos para el mercado brasileño de camiones. La caída de ventas este año ya supera el 42% en relación al primer semestre del año pasado.

En tiempos tan duros, los fabricantes del sector deben buscar soluciones para que sus negocios sean lo más rentables posible a pesar de la reducción en sus ventas.

En ese contexto, Volvo se puso en movimiento. Para atender la demanda específica de la Usina Santa Terezinha, de Maringá, industria de producción azucarera que pertenece al grupo paranaense Usaçúcar, los ingenieros de la marca sueca desarrollaron una versión cañera del modelo VM.

El objetivo fue procurar que este camión semipesado ingrese a las plantaciones de caña para realizar los trasbordos de la cosecha, tarea que tradicionalmente se ejecuta con tractores. "Nuestro compromiso es ofrecer la mejor solución de transporte para nuestros clientes", explica el sueco Claes Nilsson, presidente del grupo Volvo América Latina.

Con ese espíritu, la ingeniería de la marca fue hasta la Usina de Santa Terezinha para conocer las razones por las que se utilizan tractores en lugar de camiones para el traslado de caña de azúcar hasta la usina.

Uno de los objetivos de los técnicos, fue reducir el mantenimiento al máximo, teniendo en cuenta que en tiempos de zafra, la cosecha se realiza durante 24 horas por día y los 7 días de la semana, con paradas mínimas para reabastecimiento y cambio de conductor.

Entonces para ello, el VM 270 CV con tracción 6x4 tiene nuevas y diversas protecciones para evitar que componentes sensibles del camión estén expuestos al polvo y los impactos inherentes a los trabajos en las cañeras.

Entre otras, las partes que tienen una protección reforzada son el catalizador, el inyector de urea, las válvulas neumáticas y la llave general. Por otra parte, el radiador de aire acondicionado se relocalizó y embaló, mientras que en términos estructurales, la suspensión delantera ganó 30 mm de altura y la trasera 20 mm, con lo cual el ángulo de ataque es más amplio.

"Eso disminuye bastante la probabilidad de problemas en la parte baja del camión, generalmente provocados por los restos de la cosecha", comenta Ricardo Tomosi, ingeniero de ventas de Volvo. Además, algunos chicotes eléctricos ahora son más largos para facilitar el montaje de los implementos agrícolas específicos para el transporte de caña.

En el VM 270 CV 6x4, el bloqueo de diferencial proporciona salidas más suaves en terrenos innundados o resbaladizos. Con respecto a los tractores, este camión permite maniobras más rápidas, tiene un costo de adquisición menor, alcanza velocidades más altas y consume menos combustible, además de la ventaja de transitar por las rutas cuando debe trasladarse entre una usina y otra.

Los tractores no pueden circular por esas vías de tránsito, por lo cual deben transportarse en camiones. "Esta versión del VM se convirtió en la solución ideal para el trasbordo de la caña de azúcar", celebra Bernardo Fedalto, director de Camiones Volvo do Brasil.

A pesar del desarrollo para una demanda específica en la Usina Santa Terezinha, la nueva configuración ya se ofrece a otros clientes de Volvo que trabajan en el sector y requieren camiones de alta productividad y resistentes a averías, para atender el trabajo intenso de la cosecha de caña.

"El VM es la mejor opción para el trasbordo de caña de azúcar. El desarrollo de esta configuración fue muy importante para aumentar aún más la productividad del transporte en el sector sucoenergético", valora Francisco Mendonça, gerente de camiones de la línea VM.

Pero no solo las usinas de azúcar y alcohol generan negocios para los camiones Volvo. "El sector sucoenergético demanda varias aplicaciones, cada una de ellas con sus peculiaridades. Nuestros vehículos se utilizan en todas ellas", explica Álvaro Menoncin, gerente de ingeniería de ventas de Volvo.

Fuente: Luiz Humberto Monteiro Pereira / Auto Press Brasil en exclusividad con AutoAnuario / Airbag.