La maquinaria fue apagada el lunes y encendida de nuevo el martes en la planta de Sayama, al norte de Tokio.

El grupo había descubierto el domingo que el sistema informático de control de la producción de esa fábrica había dejado de responder y estaba infectado por el virus WannaCry que encripta los ficheros y los vuelve inaccesibles, en teoría hasta que se pague un rescate.

La planta de Sayama ensambla unos 1.000 vehículos al día.

Otras fábricas de Honda se vieron también afectadas en el extranjero, pero no se detectó en ellas ningún disfuncionamiento, precisó a la agencia de prensa AFP una portavoz del grupo.

"Estamos realizando comprobaciones detalladas", afirmó.

Unas 200.000 computadoras en al menos 150 países se vieron afectados en mayo por un ataque informático "sin precedentes" a través del sistema de explotación Windows, que perturbó el funcionamiento de muchas empresas y organizaciones.

Entre las víctimas figuraban plantas de los fabricantes de automóviles Renault y Nissan.

Por agencia AFP