Múnich, Alemania - Tesla y los fabricantes de automóviles chinos estarán en primera línea, frente a sus rivales europeos, en el salón del automóvil de Múnich (IAA), uno de los más grandes del mundo, que comienza el lunes en un contexto de incertidumbre económica.
El tradicional encuentro del sector automovilístico europeo será inaugurado oficialmente el martes por el canciller alemán Olaf Scholz.
Sin embargo, los fabricantes aprovecharán el día dedicado a la prensa, el lunes, para presentar nuevos modelos.
Entre las compañías europeas solo los fabricantes alemanes Volkswagen, BMW y Mercedes tendrán una presencia importante.
BMW ya presentó el sábado su concepto Neue Klasse (Nueva Clase), su futura generación de seis automóviles eléctricos que se fabricarán a partir de 2025.
El objetivo es satisfacer la demanda cada vez más alta a medida que se acerca el final de los motores de combustión en Europa, previsto en 2035.
Por el lado de Francia, el grupo Stellantis estará representado solo por su marca alemana Opel y el grupo Renault solo por la marca homónima, para presentar su nuevo modelo Scenic.
Habrá en cambio una gran presencia de marcas extranjeras.
La estadounidense Tesla volverá a la feria después de diez años de ausencia y también habrá la competencia de China, que está “lanzando su asalto a Europa” en este salón, apunta Ferdinand Dudenhöffer, experto del Center for Automotive Research en Alemania.
Entre los expositores, el 41% tiene su sede en China con compañías como BYD, Leapmotor, Geely o Dongfeng que exhibirán sus modelos.
Los fabricantes chinos amenazan a los europeos no en el nicho de los coches térmicos sino en el mercado estratégico de los modelos eléctricos.
El mercado chino, crucial
China sabe ofrecer modelos eléctricos a precios bajos. “Lo único que no tienen es la credibilidad de la marca”, asegura Eric Kirstetter, socio principal de la consultora Roland Berger. En paralelo, los productores europeos tienen dificultades en China.
Volkswagen representó solo el 3,1% del mercado de los coches eléctricos en China el año pasado, muy por detrás de las marcas locales BYD (18%) y SAIC (incluido Wuling) con el 11,9% y de la estadounidense Tesla con (8,7%).
“Todas las previsiones anticipan que los grupos internacionales perderán cuota en el mercado chino en beneficio de los locales y Tesla”, dice Kirstetter a la AFP.
El jefe del grupo Volkswagen, Oliver Blume, reconoció en junio los retos que plantea la “espectacular velocidad y evolución de la tecnología y las innovaciones” en China, donde han aparecido “un gran número de nuevos competidores”.
Al mismo tiempo, los fabricantes europeos están bajo presión ante la desaceleración económica en sus mercados históricos.
Aunque las ventas de automóviles en la Unión Europea (UE) han estado creciendo durante doce meses se mantienen más de un 20% por debajo de su nivel de 2019.
También se esperan protestas ecologistas durante el salón en Múnich y varios grupos de activistas han anunciado “acciones de desobediencia civil”, incluyendo una “acampada para una revolución de la movilidad” en un parque en las afueras de la ciudad.
En total, se esperan 700.000 visitantes, frente a los 410.000 de 2021.
Ese año el salón pasó a llamarse IAA Mobility coincidiendo con su traslado a Múnich, tras décadas instalado en Fráncfort.
Por Yann Schreiber y Léa Pernelle / EFE
