Si bien el acontecimiento tuvo amplia difusión en el ambiente fierrero de nuestro país, a la hora de abrir la billetera apenas dos interesados se hicieron presentes, con pretensiones (y posibilidades, claro) de quedarse con el vehículo.

Esta Ferrari 458 Spider modelo 2014, con cerca de 12.000 km recorridos, fue decomisada junto con un yate y otros bienes de lujo, en una causa de lavado de activos, investigada por la justicia uruguaya.

El vehículo, tiene un motor V8 de 5 litros, capaz de generar 570 CV de potencia, acoplado a una transmisión de 7 velocidades, heredada de los Fórmula 1.

Según publica El País Digital, la puja entre los dos postores alcanzó hasta los 271.000 dólares, momento en el que uno de ellos se retiró de la contienda, para que el otro se quedara con el lujoso auto superdeportivo.