Por cierto que hubo preguntas, pero no solo de los periodistas que acompañamos su trayectoria deportiva, sino también de parte del público presente, seguidores e hinchas de Santiago Urrutia, que además de manifestarle su admiración, querían conocer más en profundidad algunos aspectos de su vida y de la actividad que está desarrollando en Estados Unidos.
Pero vayamos al principio. Formalmente, el evento realizado el jueves pasado (18/08) en el Salón de Actos del Automóvil Club del Uruguay (ACU), mantuvo la estructura de una rueda de prensa tradicional. Bajo la conducción de Mario Rosa, el panel principal se integró con la presencia de Jorge Tomasi, presidente del ACU y de FIA Región IV, Jorge Etchamendi, gerente de la comisión deportiva del ACU y del secretario nacional de deportes, Fernando Cáceres, acompañando al protagonista principal, Santiago Urrutia.
Después de una alocución introductoria a cargo de cada uno de los integrantes de la mesa, relacionada con el automovilismo, el deporte uruguayo en general y algún aspecto destacado de la actuación del piloto coloniense, fue el mismo Urrutia quien se ocupó de repasar parte por parte su a esta altura, ya extensa carrera deportiva.
Desde su primera moto, regalo del abuelo a los tres años de edad, los primeros pasos en el karting y los triunfos en Uruguay y luego en Argentina, fueron el preámbulo del salto hacia Europa para seguir allá con las "ruedas chicas" primero y después por fin subirse a los monopostos.
Triunfos y derrotas, alegrías y decepciones son parte de cualquier carrera deportiva. Santiago se refirió a los momentos más complicados, con un notable sentido de autocrítica para seguir creciendo como deportista.
"Al terminar la temporada de GP3 en 2014 me sentí muy frustrado. No había conseguido ni un solo punto y eso para mi fue un golpe muy duro. Analicé seriamente dejar de competir".
En ese momento, fue invitado a participar de una carrera especial, el Drivers Challenge de Cancún, para competir contra pilotos de renombre mundial como Esteban Guerrieri, Matías Rossi, Johnny Cecotto Jr. y Eliseo Salazar, entre otros.
"El Challenge de Cancún me volvió a la vida. Sentí nuevamente las ganas de conducir, de ganar. En ese torneo no fui menos que ninguno de los presentes y había pilotos excepcionales".
A partir de ahí comenzó su etapa estadounidense, con el Campeonato de la Pro Mazda conquistado el año pasado y su ingreso a la Indy Lights, en este 2016.
"El año no lo empecé bien. Cometí varios errores que me costaron muchos puntos. Empecé muy presionado sabiendo que el futuro deportivo depende de poder salir campeón. Es cierto que en algunos momentos no tuve suerte. La suerte no te hace salir campeón, pero ayuda. En el óvalo de Phoenix estaba para podio y el Auto de Seguridad se me cruzó adelante".
"Llegó un momento en el que reflexioné y tomé en cuenta los errores cometidos. Perdí puntos cuando tenía un auto muy bueno. Siempre he tenido un buen auto. A veces superior al resto y a veces un pocos menos. Pero esa reflexión me llevó a pensar más las carreras y a partir de allí empezamos a enderezar esos 40 y pico de puntos de desventaja que tenía".
Cuestión de actitud
"No manejo autos de carrera por obligación. Mi suerte fue que quería hacer esto y mi familia, en especial mis padres, me apoyaron siempre y hoy lo siguen haciendo".
Pero también es absolutamente consciente de que sumado al apoyo familiar, hubo siempre un enorme esfuerzo de mucha gente para poder asistir financieramente su carrera. Desde el préstamo que su madre gestionó para comprar el primer kart, a sus cinco años de edad, hasta los aportes de los empresarios amigos de Carlos, su papá, y el de las empresas estatales y privadas, cada uno dentro de sus posibilidades son esenciales para que pueda continuar.
Ante la pregunta de uno de sus seguidores si pasó por su cabeza qué hubiera pasado con su carrera en caso de ser europeo, Santi fue categórico: "Si hubiese nacido en Europa o en Estados Unidos, no creo que hoy estaría en Fórmula Uno o en la Indy Car. Yo creo que llegué a donde llegué justamente porque tengo algo diferente y es ser uruguayo. Para mi es un enorme orgullo decir que soy uruguayo y defender a mi país".
Sobre este punto, Fernando Cáceres, secretario de deportes, recalcó que si bien tiene muy claro que no es suficiente, desde la órbita oficial se trabaja intensamente para mejorar los presupuestos destinados al deporte.
Por su parte Jorge Tomasi, subrayó y pidió especial atención de la prensa a los conceptos vertidos por Santiago. "Esa actitud de trabajo, de esfuerzo y sacrificio, de responsabilidad, debe ser un verdadero ejemplo para la juventud de nuestro país de cómo es posible alcanzar objetivos, aún en la adversidad. Es cuestión de actitud", remarcó.
Indy Car
Cuando se reintegre a la actividad, después de este breve receso, Urrutia ya tiene agendada una prueba a bordo del auto de Indy Car, de su mismo equipo. Es una instancia soñada porque además de ser el primer contacto con ese bólido, podría tratarse de un "aperitivo" para la próxima temporada, a la que aspiran tanto él como el Schmidt Peterson Motorsports.
"El equipo me ayuda muchísimo. Ellos también están dando el 100% y eso lo valoro muchísimo. Ellos saben perfectamente que no tengo un maletín con cinco millones de dólares. Saben que dependo del título para poder seguir adelante en mi carrera deportiva y están el 100% para que pueda lograrlo".
"La prueba del Indy Car es de enorme valor para mí. Más allá de vivir un sueño que es como jugar en la selección uruguaya de fútbol, tengo que concentrarme mucho en ser competitivo. La prueba será aprovechada por el equipo y por Honda para probar cosas nuevas. Pero tengo que demostrar que puedo ser competitivo si el año próximo quiero ir a la IndyCar".
Según contó, debido a la potencia de estos autos y a la velocidad que desarrollan en pista, hay una sobrecarga importante para los pilotos esencialmente en la zona del cuello. Razón por la cual se viene preparando físicamente trabajando con mayor intensidad los músculos de esa región.
De color
Finalmente habló de su relación (o no relación) con los demás pilotos, por razones meramente estratégicas.
"Me llevo bien con Negrao (compañero de equipo). Pero no tengo amistad con ningún piloto. No la necesito. No dejo de ser educado, los saludo y esas cosas. Pero amistad, no. Y no me interesa".
Además hizo referencia a su relación con Gastón "Tonga" Reyno, deportista compatriota que también vive en Estados Unidos y con el que comparten una notable amistad, amén de todas las "uruguayeces" que tienen en común.
De su vida cotidiana, habló del buen vínculo que tiene con todo el equipo. Contó que después de ir al gimnasio, regularmente se va para los talleres del equipo para almorzar juntos. Gracias a eso, el conocimiento mutuo ha permitido generar un ambiente de trabajo muy agradable y afectuoso. Lo mismo que con su ingeniero, un australiano también deportista y con tantos deseos de victorias como el propio Santiago.
Conclusión
Fue un encuentro desbordante de calidez humana. Con un clima de gran afecto, todos los presentes nos encontramos con un Santiago Urrutia muy diferente al del año pasado, en ocasión de un encuentro similar. Descontracturado, sonriente, y muy abierto, es evidente el crecimiento deportivo y humano que el joven piloto viene experimentando.
A la salida y ya casi en la puerta, me encuentro con un sonriente Jorge Tomasi que comentó: "¡Qué bueno que estuvo!". Además de coincidir absolutamente, agregué que me sorprendió gratamente el cambio de un año a otro y la madurez de nuestro joven piloto.
Que por si alguien lo olvidó, tiene 19 años.
Luis Piedra Cueva
Acerca de los comentarios
Hemos reformulado nuestra manera de mostrar comentarios, agregando tecnología de forma de que cada lector pueda decidir qué comentarios se le mostrarán en base a la valoración que tengan estos por parte de la comunidad. AMPLIAREsto es para poder mejorar el intercambio entre los usuarios y que sea un lugar que respete las normas de convivencia.
A su vez, habilitamos la casilla reportarcomentario@montevideo.com.uy, para que los lectores puedan reportar comentarios que consideren fuera de lugar y que rompan las normas de convivencia.
Si querés leerlo hacé clic aquí[+]