Esta iniciativa basada en la pintura 3D, que se viene aplicando en países tales como China, India, Georgia e Islandia, intenta otorgar mayor visibilidad a las clásicas sendas peatonales con el objetivo de reducir los atropellamientos.
Se basa sencillamente en procurar que los conductores reduzcan la velocidad mediante la ilusión óptica, para que los peatones crucen la calle con más seguridad. Según indica la agencia de noticias china Xinhua, la diferencia ya resulta notoria con más vehículos deteniéndose como consecuencia de la pintura 3D.
Si bien aún no hay estudios que puedan comprobar la eficacia de este recurso, es posible que de existir, hay serias chances de que se reduzca paulatinamente, conforme los conductores se acostumbren al sistema.
Con información de Auto Esporte
