"La última generación de vehículos diésel es crucial en nuestros constantes esfuerzos para reducir las emisiones de carbono en el transporte en carretera", dijo el presidente de la Asociación de Constructores Europeos de Automóviles (ACEA), Dieter Zetsche, en el salón del automóvil que se celebra en Frankfurt.
Este encuentro está marcado este año por las consecuencias del escándalo de los motores diésel de Volkswagen, que ha hecho caer las ventas de automóviles que vienen con este tipo de motores.
Los profesionales del sector creen que las ventas de motores diésel seguirán cayendo por la nueva normativa medioambiental pero advierten que sus equivalentes de nafta son más contaminantes.
En consecuencia, la caída de ventas de diésel aumenta mecánicamente la media de emisiones de CO2, según la asociación, que afirma que los motores eléctricos son todavía muy minoritarios en el mercado como para suponer una alternativa.
"Hasta que la cuota de mercado de los vehículos eléctricos no aumente más rápidamente, el diésel seguirá siendo el medio más eficaz de alcanzar nuestros objetivos" de emisiones de CO2 (un máximo de 95 gramos emitidos por kilómetro en 2021), dijo Zetsche, que también es presidente del grupo Daimler (marcas Mercedes y Smart).
Por agencia AFP
