Tokio, 12 de abril - El presidente del fabricante japonés de airbags Takata, Shigehisa Takada, anunció hoy su dimisión, con efecto inmediato, tras completar la venta de casi todos sus activos y negocios a la compañía estadounidense Key Safety Systems (KSS).
Takata, declarada en quiebra el pasado noviembre por el escándalo de sus dispositivos defectuosos que han causado víctimas mortales, completó el 10 de abril la transferencia de sus activos y negocios, excepto algunos relacionados con la fabricación de los airbags de nitrato de amonio deficientes, explicó en un comunicado.
Al completarse la transferencia Takada renunció como presidente y director representativo de la compañía, cargos que ostenta desde hoy (11 de abril, hora estadounidense) Yoichiro Nomura, hasta ahora director financiero y director ejecutivo del grupo.
"Espero que, en adelante, la tecnología y los recursos humanos que hemos producido y entrenado, respectivamente, contribuyan al desarrollo de la industria automotriz y la seguridad de nuestros clientes bajo el nuevo sistema de gestión de KSS", comentó Takada.
Fundada como empresa textil en 1933, Takata empezó a fabricar airbags en 1987 y llegó a erigirse como uno de los líderes mundiales del sector; la compañía cuenta con 56 plantas en 20 países y unos aproximadamente 46.000 empleados.
Key Safety Systems es un proveedor de componentes de automóvil con sede en Michigan (EE.UU.) propiedad de la china Ningbo Joyson Electronic Corp, y cuenta con una red global de 13.000 empleados.
El acuerdo de venta de la compañía con sede en Tokio a KSS fue anunciado en noviembre de 2017 y queda finalmente cerrado con el desembolso de 1.588 millones de dólares (1.284 millones de euros).
Agencia EFE
